Redondo, es expulsado del PSOE. Felipe, dice que le costó mucho votar al PSOE de Pedro Sánchez. Guerra, duda de asistir a la manifestación del PP ... Los tres han trabajado por modernizar y avanzar en la democratización de España, los tres se han quedado en la España de la década de los 80, los tres son comprensivos con las estrategias de la derecha con respecto a Cataluña. Que pena de desprestigio de los tres dentro del socialismo (y de la sociedad), sí, da mucha tristeza ver a tres líderes del socialismo pasado, ir de micrófono en micrófono despotricando en contra de sus compañeros y de su partido actual, qué mal envejecen. Pedro Sánchez lidera una nueva generación de socialistas que ganaron las primarias del PSOE, con sus aciertos y sus equivocaciones le corresponde a esa nueva generación liderar el partido y en este caso con posibilidad de liderar también el país. Apoyémoslos o critiquémoslos pero con lealtad y sin comprar el discurso de la derecha. Tendría que hacerles reflex
En los últimos tiempos la Unión Europea está sometida a la presión política de tomar decisiones importantes y con repercusiones directas en la vida de la ciudadanía europea. La compra de las vacunas COVID y la respuesta conjunta a la pandemia, el posicionamiento de solidaridad con Ucrania y el envío de material militar a través de sus países, la lucha contra la inflación que están sufriendo todos los Estados ... son buenos ejemplos de ello. Todas estas decisiones se toman en el Parlamento y en el Consejo de Europa, donde están presente los 27 Presidentes de los países que la conforman, y todos ellos dispares en su ideología y en sus prioridades, lo que conlleva una dificultad real añadida a la hora de acordar y tomar decisiones. Buena parte de los países de la U.E. están gobernados por Presidentes contrarios a la propia UE (bueno, mejor dicho, contrarios a la política de la UE que merma la autonomía de los países miembros, pero no son contrarios a sus fondos económicos que los r